05-26-2023 Faithwire

Archivo: el general sudanés Abdel-Fattah Burhan, jefe del consejo militar, saluda a sus partidarios a su llegada para asistir a un mitin respaldado por militares, en el distrito de Omdurman, al oeste de Jartum, Sudán, el sábado 29 de junio de 2019. (AP) Foto/Hussein Malla, Archivo)

La situación en Sudán se ha vuelto insostenible y mortal, según el testimonio de un misionero cristiano. Las batallas entre las Fuerzas de Apoyo Rápido y el ejército de Sudán han provocado un colapso de la ley y el orden, obligando a cientos de miles de personas a huir hacia países vecinos en busca de seguridad. Se informa de desplazamientos masivos, destrucción, violaciones y una escasez extrema de alimentos, agua y energía. Los hospitales están fuera de servicio y las iglesias están siendo saqueadas y atacadas. Se necesita ayuda humanitaria urgente y oraciones por la paz y la protección de los afectados.

Sudán ocupa el décimo lugar en la Lista de Vigilancia Mundial de Open Doors como uno de los países más difíciles para los cristianos. La libertad religiosa es limitada y la persecución cristiana sigue siendo alta. La guerra en curso en el país agrava aún más la situación. Existe el temor de que la pena de muerte por abandonar el islam pueda restablecerse, y la incertidumbre política y la falta de una transición democrática son motivo de preocupación. Es necesario brindar apoyo a los refugiados y orar por la paz en Sudán y en los países vecinos afectados por esta crisis.

La comunidad internacional está evacuando a su personal diplomático debido al aumento de la violencia. Se necesita una intervención urgente para poner fin al caos y proporcionar asistencia humanitaria a quienes sufren. Oremos por Sudán, por los refugiados y por los países vecinos que se enfrentan a las consecuencias de esta crisis.